PINOCHO

Pinocchio es la marioneta de madera protagonista del libro "Las aventuras de Pinocho", escrito por Carlo Collodi y publicado en Italia en un periódico desde 1882 hasta 1883.

El Pinocho original era malo, malísimo con deciros que  en cuanto Geppetto le hace las piernas, sale corriendo y se escapa….. y al pobre Geppetto le lleva un carabinieri a la cárcel por ser un mal padre. Al llegar a casa Pepito Grillo le dice que ha sido malo y ni corto ni perezoso le tira un martillo, vamos que no le dejó al pobre silbar aquella canción tan simpática, .....dame un silbidito….Pinocho tiene hambre, esta solo en casa ya que Geppetto está en la cárcel, tiene hambre y frío y se duerme junto a la lumbre y se quema los pies, al día siguiente Gepetto llama a la puerta y Pinocho no le abre porque no puede andar, Geppetto no le cree al principio, como era tan mentiroso…finalmente le abre y al ver que tiene tanta hambre le da las tres peras que tenía él para desayunar, pero Pinocho aún con hambre no quiere comerse ni las pieles ni los corazones…Geppeto hace unos pies nuevos a Pinocho y vende su chaqueta para comprarle un abecedario para ir a la escuela, pero el travieso Pinocho vende el libro y se va a un teatro de marionetas.Era malísimo, tan malo que lo acaban colgando de un árbol, aunque al final el hada de cabellos azules le baja y le da de nuevo la vida.Menos mal que nuestro amigo Disney nos presentó una historia menos truculenta y  más tierna  con un Pinocho más travieso que malo.

En Roma me encontré con una preciosa tienda BARTOLUCCI

En esta tienda todos los juguetes son de madera, totalmente artesanales, el gran protagonista era Pinocho, había muchos modelos, a cual más simpático, nos atendieron fenomenal hablaban muy bien español, me dejaron encantados que hiciera todas las fotos que quisiera y nos empaqueto con mucho mimo los recuerdos que compramos.

¡GRAZIE MILE!

He vuelto inspirada y os dejo con mi Pinocho, es bastante malo también, le he pillado tirando del rabo a Perico, pero bueno ahora está ahí tranquilo, merendando un chocolate calentito.